CRONIQUILLA
ELEGÍA AL AGUA POTABLE
Orlando Clavijo Torrado
¿Recuerdas, agua, aquel tiempo/en que faltaste en Cúcuta?/ Siempre habías sido esquiva/ - cual mujer deseada - /con tu cuerpo ondulante, inaprensible, lista al escape./De pronto, se te antojó castigarnos/castigar a toda una ciudad /con verdadera saña/en los años 2010 y 2011.
Eran, justamente, tiempos de lluvias./ Un millón de habitantes clamaban por ti./ La gente se amotinó /porque esta gente es bragada y enardecida./Hubo disturbios y por poco/la situación se desborda./Y no es que te hubieras evaporado/Estabas abundante/ Rebosabas/como ubres de hembra preñada/./Venías en los brazos de dos ríos:/Zulia y Pamplonita./
Pero te volviste turbia, sucia/y nadie te podía probar/¡Uf, qué asco! ¡Y qué peligro! /No permitías que te purificaran/¡Terca, terca, terca!
Ocurrió, entonces, que te aparecías a chorritos/Aún así, ¡qué alivio cuando llegabas a mi hogar!/Ahora, si te desparramabas en chorro completo/ provocaba besarte/ besarte toda/ chorro arriba.
Había que recogerte con amor/con extremo cuidado/ en disímiles cuencos. /Si hubieras visto/la alegría de mis nietos/metiendo en el tanque lleno del lavadero/botellas plásticas de Coca-cola/ de dos litros y medio/. (Porque era preciso aprontar/ para el próximo racionamiento/para la sequía del día siguiente).
¡Como se admiraban/ y cómo disfrutaban al verte gorgorear!/”Más tarde, en el bachillerato-/les explicaba yo-/estudiarán las leyes de la física. /Allá comprenderán que el agua/ desplaza al aire. /Por eso hace gluglú”.
Seguramente ellos contarán/pasados los años/ que eran tiempos terribles/como de guerra/en que no había agua/y debía almacenársela en envases de bebidas gaseosas./ ¡Sí, así contarán, escandalizados!/
Los jovencitos te suplican en su lenguaje:/ “No te vayas, por fa, ¿si? -/ Los gomelos te piden:/ “¿Te quedas, okey?”
Confesamos que nunca/te habíamos apreciado como te mereces./Cuando te tenemos ordinariamente/ te derrochamos/¡oh, qué dolor! / te subestimamos, pero en este trance/en que te añoramos día a día,/ minuto a minuto,/sabemos que eres/ un tesoro, el oro mismo, una riqueza.
(¡Y bien cara que eres!/ ¡Cómo cuesta el gozarte!/Pero no importa:/por ti se paga/ lo que sea).
Todos a una te rogamos:/¡Nunca más nos abandones!/ ¡Agüita preciosa!/Agüita linda!/Agüita del alma!/¡Agüita potable!
orlandoclavijotorrado.blogspot.com
Cúcuta, 30 de mayo de 2011.
lunes, 30 de mayo de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Datos personales
- Orlando Clavijo Torrado -
- Cúcuta, Norte de Santander, Colombia
- Casa-Museo General Francisco de Paula Santander - Villa del Rosario
No hay comentarios:
Publicar un comentario